jueves, 30 de diciembre de 2010

Hoy volvimos

Quiero ponerte un piso para no dormir.




Hoy volvimos.


Empezamos la rutina del no-vivir digna de cada miércoles (o jueves, o viernes, o sabadete). Caminamos por Gran Vía, cuestión de variar un poco. Nos tomamos con ansia y con respeto (rollo sexo-respetuoso), como debe ser, un buen café. Esta tarde, nos hemos bebido unas cuantas gotitas de rock and roll, hemos surfeado por las nubes y encima nos hemos comprado una gran vela (que era tan grande que hasta rozaba al mismísimo J.Morrison). Estuvimos con gente glamurosa, entre otras muchas cosas. Y aprendimos los valores propios a las fuentes y a las farolas. Hoy Madrid estaba tan iluminada que hasta me acordé de ti. Me paré vela en mano y me senté en un banco. En un banco sucio y gastado. En un banco que sólo se ve, se siente y se palpa en Madrid. Hace tiempo ya que no te escucho. Mucho. Me gustaría contar las horas y los segundos que nos separan, admirar cada rizo de tu pelo e irme otra vez. Sería indescriptible. Y efectivamente, hoy es un gran día. Uno de esos. Uno en los que puedes revivir un momento una y otra vez. Uno en los que piensas “vamos a fingir que nos hemos muerto” tan alto que funciona. Joder, si, lo es.


 


Hoy quiero ser tu esclavo inerte, sumiso a cualquier decisión.


BB Baise.

1 comentario: